Una sesión de belly painting con tu primer hijo es una sesión familiar que recordaréis todos como una experiencia y como algo divertido que no deja de ser el proceso y la aventura de traer otro hermanito al mundo.
Dependiendo de la edad del peque, le podemos hacer un detalle en tripa o cara con el diseño que queráis y que quiera sobre todo el niño.Este tipo de sesiones a la hora de las fotografías principalemente, requiere más tiempo y es por eso que os aconsejamos que la sesión sea Premium, una sesión que incluye más tiempo y fotografías, ya que no sabemos como reaccionará el peque ante que le pidamos que pose y es por ello que tenemos que hacer mediante el juego, que este momento sea algo ameno para el y que pueda disfrutarlo también como algo
dedicado, además de a su mamá y a su hermanito, a el.
Es necesario que la mamá venga con un acompañante que esté con el otro hijo mientras que la pintora y la mamá realizan el diseño. Pareja e hijo pueden estar en el centro, en una de las salas diáfanas que tienen pelotas y juguetes, o pueden salir al parque cercano o Madrid Río (El parque que recorre el río manzanares) hasta que se acerque la finalización de la sesión.
Lo normal es que hayamos planeado este momento antes y anticipemos al pequeño, dependiendo de la edad claro, de que vamos a ir a un sitio en el que nos van a pintar de lo que queramos y que el niño elija y está agusto con su diseño y a ser posible, que este tenga que ver con el dibujo de la tripa de mama.
A la hora de las fotos, no sabemos como los niños se pueden comportar: Quizás en casa le apetecía mucho y ahora le da una vergüencia tremenda posar o se siente incómodo. Tenemos la suerte de que la pintora es además educadora infantil y se valdrá de diferentes tácticas para sacar fotos geniales de la familia.
